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Mantener los uniformes médicos en buen estado no siempre es fácil: se lavan con frecuencia, se exponen a largas jornadas de uso y necesitan conservar un aspecto profesional. Una de las dudas más comunes es si se pueden meter en la secadora sin dañarlos.
La respuesta corta: depende del tipo de tela. No todos los uniformes se comportan igual frente al calor.
A continuación encontrarás una guía clara y práctica para evitar daños, prolongar la vida útil de tus scrubs y mantenerlos impecables por más tiempo.
No existe una respuesta universal. Algunos materiales resisten bien el calor, mientras que otros se dañan fácilmente.
Los uniformes actuales se fabrican con mezclas técnicas que combinan comodidad, elasticidad y resistencia, pero aun así tienen límites frente a la temperatura.
Por eso es fundamental conocer qué tipo de tela usas antes de meterla a la secadora.
Los scrubs con alto contenido de poliéster son los menos propensos a dañarse.
Lo único a evitar: el calor excesivo.
Las altas temperaturas pueden endurecer la tela y reducir su vida útil.
Los uniformes totalmente de algodón son cómodos, pero enfrentan dos problemas en secadora:
Si decides secarlos en máquina, siempre debe ser en la temperatura más baja, aunque lo ideal es secado natural.
Este tipo de tela es el más común en scrubs económicos.
Pueden ir a secadora, pero:
Regla de oro: secado a baja temperatura.
Cualquier uniforme con elasticidad extra nunca debe exponerse a calor alto.
El elastano se daña con facilidad y, una vez afectado, la prenda:
Baja temperatura o secado al aire es lo ideal.
Incluso cuando la tela “tolera” la secadora, los siguientes problemas pueden aparecer:
Usar secadora no siempre arruina los scrubs, pero sí acelera su desgaste.
El enemigo número uno es el calor.
Reduce fricción y protege costuras.
Luego termina de secar al aire. Esto evita encogimiento y pérdida de forma.
Protege colores, bolsillos y bordados.
La pelusa se adhiere especialmente a uniformes oscuros.
Si tu uniforme entra en una de estas categorías, evita la secadora para prolongar su vida útil.
Un cuidado correcto hace que tus scrubs mantengan su forma, color y comodidad por mucho más tiempo.